Reseña #69: Firelight #3: Hidden: Chica de Luz — Sophie Jordan

  

Título: Hidden: Chica de luz

Autor: Sophie Jordan

Editorial: V&R

Páginas: 242

 Precio: $7.030

ISBN: 978—987—612—577—2

“Cuando Miram es capturada por los terribles enkros, Jacinda siente que su deber es rescatarla. Para ello, junto a su hermana Tamara, Will y Cassian, idea un plan para ingresar a la fortaleza de sus enemigos. Allí encontrará a Miram, a otros drakis prisioneros y se enfrentará a la misteriosa desaparición de su padre.

Jacinda confía en salir sana y salva de allí para empezar una nueva vida junto a Will, lejos del clan. Pero lo que no imagina es que escapar será apenas el comienzo de una sangrienta odisea... Nada será igual cuando los protagonistas se enfrenten a la verdad, cuando respiren la atmósfera de traición y muerte que envuelve esta novela.

El amor, la amistad y la lealtad, los conflictos familiares y de poder, se ponen a prueba en el ansiado final de la trilogía Firelight.”

Ah hace tiempo que no terminaba una trilogía. Sensación de vacío mode on

Hidden, el último libro de la trilogía de Firelight. Chicas mitad dragones y mitad humanas, superando los obstáculos de ambos mundos donde coexisten, luchando contra los enemigos que deseaban acabar con sus existencias o con sus relaciones amorosas.

Esta trilogía fue bastante entretenida, me gustaron todos los libros, además que fue agradable ver el crecimiento por parte de los protagonistas. Realmente aquí se vio como fueron madurando y tomando los sucesos que las atacaban con más perspectiva y no tan de forma visceral. Odio cuando se guían por sus emociones más absurdas, porque siempre terminan arruinando aún más las cosas. Por lo que esperaba bastante de este libro y sin duda alguna no me defraudo.

La edición sigue la línea de sus dos antecesores, con ese relieve maravilloso en la piel de nuestra querida Draki de fuego. Está muy lindo, no tiene nada que envidiarle a los anteriores.

En esta última parte la autora nos sumerge en la continuación directa el segundo libro, donde tienen que enfrentarse a los enkros para poder salvar a Miram, hermana de Cassian.

Debo decir que desde el comienzo todo fue solo adrenalina, descargas de acción y más acción mientras todos los cabos sueltos se iban resolviendo de forma rápida para después enfrentarse a nuevos desafíos. Fue como ir desenredando las luces para el árbol de navidad, pero muuucho más fácil. No hubo sorpresas y todo termino siendo bien predecible, como el resto de la historia, lo que no quiere decir que sea malo, ya es así desde el primer libro y no deja de ser entretenido.

A través de las páginas se puede ver como la protagonista, Jacinda, cumple su desarrollo final, al igual que su hermana Tamara. Ambas dejaron de tener esas acciones tan descontroladas y adolescentes, dejando que sus caracteres fueran forjados por las graves situaciones que las rodearon a través de los tres libros. Es por ello, que fue muy agradable ver sus formas de actuar y sobre todo la de Jacinda, que usualmente solía ser más sumisa y pasiva por el bien de los demás. Ahora podemos verla más decidida y confiada.

Referente a los personajes masculinos, tanto Will como Cassian, sucede lo mismo. Por siempre seré #teamwill ya que jamás había leído sobre un William tan paciente y entregado, o sea, William Herondale tiene mi corazón, pero en acciones y amor, sin duda le gana William Rutledge porque hombre literario más paciente, no encontraremos.

Nada más que decir, fue entretenido mientras duró, quizás faltó conocer otros Drakis, no entregan mucha información sobre cómo viven en otros lugares. Eso me habría gustado saber, pero fuera de ello, fue un final satisfactorio, sin desilusiones. Hubieron ciertos detalles que se quedaron sin resolver, pero como era sobre personajes nuevos que duraron menos que un dulce en el libro, no le di mayor importancia porque en si la historia es netamente romántica.

Sin duda puedo recomendar esta trilogía para pasar un rato ameno.